Una de las problemáticas medioambientales más complejas de la Capital Provincial era la polución por los cenizales que se depositan las termoeléctricas en la zona de La Paragua, zona colindante a la ciudad. Con las lluvias de agosto de 2015 se produjeron aluviones de ceniza que llegaron al mar. Pescadores y buzos orilleros denunciaron el hecho a la Gobernación Provincial. Norgener, en un proceso de mitigación ambiental comenzó, a partir del 1 de abril, a depositar las cenizas en la zona especialmente habilitada cercano a la zona de Barriles a 15 kilómetros al sureste de Tocopilla, frente a la Quebrada Ancha.
Los cenizales de Norgener en La Paragua quedan clausurados. El nuevo depósito tiene una proyección mínima de uso de 30 años, con una inversión inicial de más de un millón de dólares. La empresa todavía no emite un comunicado oficial del cambio en los acopios.